La fotografía profesional: libertad y control
Si alguna vez te sientes persuadido por el mundo de la fotografía, pronto te darás cuenta que en los equipos profesionales no es tan fácil como darle al botón de disparar como en el móvil, si alguna vez te manejas con este material sin conocimientos previos, lo más seguro es que te encontrarías perdido, incapaz siquiera de tomar una sola foto en condiciones.
La razón de esto es que estos equipos te dan a ti, el usuario, total control y libertad sobre la configuración de la cámara, y por lo tanto, libertad sobre la imagen que quieres tomar, y esto mismo, tanto en foto como en vídeo profesional, es muy importante. Pero claro, para poder llegar a ese control sobre la cámara hay que dominarla y entenderla, pues existen ciertos conceptos básicos que seguro habrás pasado por alto pero lo cierto es que son fundamentales.
¿Quieres dominar tu cámara profesional y tomar las fotos que TÚ quieres hacer?
Siga leyendo:
El triángulo de exposición: la base de toda fotografía
Apertura
Comenzaremos con los valores básicos que debemos configurar para poder empezar a tomar fotografías con la cámara. Se trata de uno de los pilares esenciales el triángulo de exposición: formado por la apertura, la velocidad de obturación y la sensibilidad ISO. La apertura (lo encontrarás bajo el símbolo f/valor) regula la cantidad de luz que entra a la cámara y afecta la profundidad de campo, es decir, a qué distancia del fondo alcanza la cámara. Cuanto más abierto el diafragma (número f bajo), más desenfoque en el fondo.
Velocidad de obturación
La velocidad de obturación determina el tiempo que el sensor está expuesto a la luz. Velocidades rápidas (1/1000s) congelan el movimiento, mientras que velocidades
lentas (1/30s o menos) capturan efectos de desenfoque.
ISO
El ISO mide la sensibilidad del sensor a la luz. Un ISO bajo (100-400) mantiene la imagen nítida, mientras que un ISO alto (1600 o más) es útil en condiciones de poca luz, aunque introduce ruido digital. Cuando tomes una fotografía, deberás ajustar estos valores según la iluminación y las características de la imagen a tomar.
La composición: cómo organizar visualmente tu imagen
La composición define cómo se organizan los elementos en la imagen. Existen esquemas o guías que ayudan a equilibrar la fotografía y así hacerla más atractiva.
Regla de los tercios
La más famosa es la regla de los tercios, que divide la imagen en nueve partes y recomienda colocar los puntos de interés en las intersecciones.
Espiral dorada
Por otro lado, la espiral dorada, inspirada en la proporción áurea, dirige la mirada del espectador a través de un flujo natural en la imagen.
Iluminación: el alma de la fotografía
Un hecho que nunca debes olvidar es que, en fotografía, la iluminación lo es TODO, si quieres darle carácter y atmósfera a tu foto, lo necesitarás. En fotografía de retrato, existen distintos esquemas de luz que influyen en la forma en la que se percibe un rostro.
Iluminación split
La iluminación split divide la cara en dos mitades con una clara separación de luz y sombra, generando dramatismo.
Luz Rembrandt
La luz Rembrandt, utilizada en pintura y cine, crea un triángulo de luz en la mejilla opuesta a la fuente luminosa, dando volumen al rostro.
Iluminación butterfly
Por su parte, la iluminación butterfly, con una fuente de luz cenital, genera una sombra en forma de mariposa bajo la nariz y resalta rasgos faciales con un efecto estilizado.
El color: emoción e impacto visual
Otro elemento fundamental en fotografía es el color, que permite crear imágenes con impacto visual. Aquí la famosa teoría del color y el círculo cromático serán nuestros guías.
Colores complementarios
Los colores complementarios, ubicados en lados opuestos del círculo (como azul y naranja), generan contrastes llamativos.
Colores análogos
Los colores análogos, cercanos entre sí (como azul, verde y turquesa), producen armonía y suavidad.
Tríada de colores
La tríada de colores, formada por tonos equidistantes en el círculo cromático, aporta equilibrio y dinamismo. Dominar la combinación de colores permite que las imágenes transmitan emociones y refuercen la narrativa visual.
Lentes y distancias focales: cómo afectan tu imagen
Por último, es crucial conocer cómo los objetivos y sus distancias focales afectan la imagen.
Gran angulares
Los objetivos de distancia focal corta (gran angulares, como 16mm o 24mm) capturan un campo de visión amplio, ideales para paisajes, aunque pueden distorsionar los bordes.
Lentes estándar
Las lentes estándar (50mm) ofrecen un ángulo de visión similar al ojo humano, proporcionando una representación natural de la escena.
Teleobjetivos
Los teleobjetivos (85mm, 135mm o más) permiten acercarse a sujetos lejanos y comprimen la perspectiva, desenfocando mejor el fondo y resaltando los detalles del
sujeto.
Conclusión: comienza con bases sólidas
Entender estos principios te permitirá comenzar en fotografía con bases sólidas. Con el tiempo, experimentarás y expandirás tus conocimientos, lo que te ayudará a desarrollar tu propio estilo y capturar imágenes que realmente transmitan lo que deseas expresar.
Esperamos que te haya servido este artículo ¡Buena suerte, fotógrafo!
